El 21 de Agosto de 2007 empezamos un viaje para recorrer algunos países de Sudamérica: Brasil, Bolivia, Perú, Chile, Argentina y Uruguay. Hemos creado esta bitácora para ir anotando las cosas que pasan a espectadores como usté.
Habrá dos territorios separados: uno lleno de lo que Ana haya visto y el otro no.

Que lo sepas...

“Durante mucho tiempo estuve pensando que la vida, la vida de verdad, estaba aún por empezar. Pero siempre había un obstáculo en el camino, algo que debía solucionarse en primer lugar, algún asunto inacabado, ocupaciones, deudas por pagar. Finalmente me di cuenta de que todos esos obstáculos eran mi vida. Esta forma de ver las cosas me ha enseniado que no existe un camino hacia la felicidad. La felicidad es el camino. Así que valora cada momento que vivas y recuerda que el tiempo no espera por nadie. La felicidad es un viaje, no un destino." (Souza)

LXVI (24/10/07) Aguas Calientes, PE

Cuzco-Aguas Calientes, Perú
Marianela apereció con todo, muy agradable y cariñosa. Nos sentimos fatal por pensar que nos iba a estafar. Nos acompañó a tomar el bus que nos llevaría a Ollantaytambo visitando el Valle Sagrado y sus ruinas.
Pisac, primera parada. Mercado tradicional y ruinas incas. Lo mejor, las terrazas construidas para cosechar, adornar y sostener el terreno. Ondulantes a lo largo de toda la ladera, hacen que la montaña tenga movimiento propio. Pero todo esto no borrará el hecho y siempre quedará en mi memoria Pisac, como el sitio donde se me cayó la mochila en un water lleno de pis.
Ollantaytambo, un pueblo en donde el río discurre por canales de piedra entre las estrechas calles. El pueblo en sí mismo es idílico, pero las ruinas que están en las laderas de la montaña son impresionantes. Otra vez terrazas de piedra.
La ruta por el Valle Sagrado continúa pero nosotros nos quedamos en Ollantaytambo para tomar el tren hacia Aguas Calientes. Sale a las 20:15, así que aprovechamos para pasear y disfrutar de las vistas. Cenamos y vamos a la estación, en la que hay un montón de turistas que hacen lo mismo que nosotros.
Llegamos a Aguas Calientes a las diez de la noche. El tren se adentra por el pueblo, no para en una estación. Buscamos el hostal y nos acostamos. A las cinco de la mañana nos tenemos que levantar para estar en Machu Picchu a las seis, cuando abren.
-Ana-

Pegamento en los ojos
Cuando uno se levanta y el plan que tiene por delante es ir a ver Machu Picchu, o cosas así, quisiera uno poder ponerse pegamento en los ojos para que nada de lo que viera terminara por desprenderse.
-Luis-

1 comentario:

Unknown dijo...

A los que hacen las americas un nuevo saludo del que se va a escudriñar por un ratito las otras montañas, en las que voy a echar de menos un matecito de pupusa con vuestra compañía. Me cuesta ponerme al día con vuestro recorrrido..