El 21 de Agosto de 2007 empezamos un viaje para recorrer algunos países de Sudamérica: Brasil, Bolivia, Perú, Chile, Argentina y Uruguay. Hemos creado esta bitácora para ir anotando las cosas que pasan a espectadores como usté.
Habrá dos territorios separados: uno lleno de lo que Ana haya visto y el otro no.

Que lo sepas...

“Durante mucho tiempo estuve pensando que la vida, la vida de verdad, estaba aún por empezar. Pero siempre había un obstáculo en el camino, algo que debía solucionarse en primer lugar, algún asunto inacabado, ocupaciones, deudas por pagar. Finalmente me di cuenta de que todos esos obstáculos eran mi vida. Esta forma de ver las cosas me ha enseniado que no existe un camino hacia la felicidad. La felicidad es el camino. Así que valora cada momento que vivas y recuerda que el tiempo no espera por nadie. La felicidad es un viaje, no un destino." (Souza)

CLII (21/01/08) Buenos Aires, AR

Buenos Aires, Argentina
Para el último día hemos programado la zona más céntrica, los barrios de San Nicolás y Retiro. Caminamos hasta ellos, porque no quedan demasiado lejos de San Telmo. Vemos el enorme Teatro Colón, aunque sólo por fuera porque las obras de reforma mantienen las visitas alejadas desde hace dos años.
La primera sorpresa del día nos la llevamos al ir a sacar dinero. Parece que la red que normalmente utilizamos no funciona. Preguntamos e intentamos la extracción en seis bancos distintos pero nadie sabe nada. Casualmente la oficina de VISA está cerca y nos remiten a ella. Un guardia de seguridad nos da unos números de teléfono (ni siquiera tienen personal disponible para atender al público) con los que nos entretenemos un buen rato pero que no nos solucionan nada. Cuando nos aburrimos lo intentamos en otro cajero, de otra red diferente, y tenemos suerte. Salimos disparados hacia el taller de la arquitecta, que lleva un buen rato esperando por nosotros. Está en Palermo, así que volvemos a recorrer el bonito barrio.
Es una chica muy agradable y nos enseña casi todo su trabajo. Escogemos, después de otro buen rato de indecisión, uno de los más grandes. Vamos a tener que hacer obras en el piso para colgarlo. El paquete es algo incómodo pero pesa muy poco, así que no vamos al hostal y continuamos nuestro plan.
El metro nos lleva a Retiro y caminamos entre los edificios acristalados y ultramodernos del centro financiero. También vemos otras construcciones representativas de Buenos Aires, como la Torre de los Ingleses o el elegante edificio Kavanagh.
Regresamos paseando, no demasiado tarde, para preparar con tiempo el equipaje. Cenamos en El Federal de nuevo.

-Ana y Luis-

Atelier
En casi pleno corazón de Palermo Soho, en la mismísima J.L. Borges, encontramos un portal junto a un edificio en obras. La puerta se resiste a abrirse porque está vencida desde que derrumbaron la casa de al lado y hay que tirar con fuerza. Varios tramos de escalera de muy diferente naturaleza nos llevan a un amplio estudio adesvanado, pasando por lo que fuera una vivienda con clase y techos altos y por pasillo en los que se amontonan los óleos y la capa de polvo es otra mano de pintura más sobre ellos.
El lugar de trabajo está decorado con espasmos de improvisación y abandono, a partes iguales. Se pueden ver telas pintadas haciendo de biombos, caballetes con lienzos en espera de inspiración, varias mesas poco sólidas llenas de proyectos.
Colgados como ropa mojada, varios móviles quisieran abstraerse pero la atmósfera densa del semibasurero a ratos se los come también. Sólo encuentran cierto placer en una danza monótona a ritmo del martillo hidráulico cercano.

-Luis-

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