La Paz, Bolivia
Nos informamos de cómo hacer todo lo que queremos hacer y con este plan debemos ampliar la visa, se nos acaban los días para estar aquí. Vamos a Inmigración y en un minuto nos dan 60 días más de estancia, total, 90 días.
Visitamos el Museo Arqueológico Tiwanaku, una cultura que pervivió aquí por miles de años.
También visitamos el Museo de Arte Contemporáneo, que más parecía la colección de arte de la abuela. El edificio y las condiciones de las salas (en muchos casos pasillos) son deplorables.
El tráfico aquí es caótico y como todas las aceras están repletitas de puestos ambulantes caminar por la ciudad a veces es un peligro.
Casualmente hay un certamen de cine latinoamericano, así que recorrimos la ciudad en busca del único cine que expone las películas. Cuando llegamos habían cambiado la película que se exhibía y al final vimos una peruana bastante buena.
Cuando salimos ya era de noche y aquí, en vez de estrellas, se puede ver una franja a lo largo del horizonte de lucecitas blancas y naranjas, son los barrios más pobres en las laderas de las montañas.
-Ana-
Nos informamos de cómo hacer todo lo que queremos hacer y con este plan debemos ampliar la visa, se nos acaban los días para estar aquí. Vamos a Inmigración y en un minuto nos dan 60 días más de estancia, total, 90 días.
Visitamos el Museo Arqueológico Tiwanaku, una cultura que pervivió aquí por miles de años.
También visitamos el Museo de Arte Contemporáneo, que más parecía la colección de arte de la abuela. El edificio y las condiciones de las salas (en muchos casos pasillos) son deplorables.
El tráfico aquí es caótico y como todas las aceras están repletitas de puestos ambulantes caminar por la ciudad a veces es un peligro.
Casualmente hay un certamen de cine latinoamericano, así que recorrimos la ciudad en busca del único cine que expone las películas. Cuando llegamos habían cambiado la película que se exhibía y al final vimos una peruana bastante buena.
Cuando salimos ya era de noche y aquí, en vez de estrellas, se puede ver una franja a lo largo del horizonte de lucecitas blancas y naranjas, son los barrios más pobres en las laderas de las montañas.
-Ana-
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